top of page
  • Alejandro Lucero

Dolor de piernas al correr

Cambié un poco el título, lo hice para que nos entendamos: cuando los médicos hablamos de la pierna nos referimos a la región de la extremidad inferior que se encuentra entre la rodilla y el tobillo (la que está entre la rodilla y la cadera es el muslo); así que el dolor de piernas al correr comprende más que el dolor de la pantorrilla.


El mes pasado escribí sobre las radiculopatías lumbares y el síndrome compartamental relacionado con el ejercicio, ahora lo haré de otras causas frecuentes y no tan frecuentes de dolor de piernas al correr. Todas estas lesiones tienen un factor en común: el SOBREUSO*, es decir, “se pasan de cucharadas de entrenamiento”.


En la actualidad al dolor en el borde medial (o interno) de la pierna que se presenta al correr se le denomina Síndrome de Estrés Medial de Tibia (SEMT), es una afección del hueso, su periostio (por eso le decían periostitis), los músculos y los tendones de la pierna, asociados a algunos factores como alteraciones en la postura del pie y tobillo, a la desalineación de las extremidades, el sobrepeso y las deficiencias en la técnica de carrera; antes se pensaba que el calzado y el terreno en el que se entrenaba eran factores importantes en su aparición, pero estudios recientes y con mayor calidad metodológica, no han podido encontrar relaciones entre estos y el SEMT. Debido a que es la antesala de una fractura por estrés, es muy adecuado realizar estudios de imagen y estadificar la severidad de la lesión; requiere tratamiento específico y claro, eliminar el impacto, así como corregir los factores asociados.


Hasta antes del año 2013 las lesiones musculares en los deportistas (incluyendo los calambres) no tenían una nomenclatura médica estandarizada, lo que traía consigo confusión y desafortunadamente, pobres abordajes terapéuticos. Así, las lesiones musculares en el ejercicio son de dos tipos, unas son por trauma directo (heridas cortantes o golpes directos); las que más nos interesan ahora son las relacionadas con el ejercicio, de las cuales hay 4 tipos y muchos subtipos (que flojera!). De esta manera, un grupo de lesiones musculares que generan dolor en la pierna al correr son los calambres (lesiones musculares Tipo 1A), su origen es complejo y a diferencia de lo que se piensa, la deficiencia de electrolitos es una causa rara de los mismos, lo más frecuente es que se generen por un aumento de temperatura local y corporal, frecuente cuando el ejercicio se lleva a cabo en ambientes calurosos y húmedos, la pobre hidratación contribuye también al fenómeno, así como la fatiga; algunas personas son susceptibles a los calambres y requieren evaluación médica, pero la mayoría solo necesitan mejorar su preparación: entrenamiento, hidratación y repostaje de combustible durante el ejercicio y la competencia; aclimatarse al ambiente caluroso y húmedo es indispensable.




Mucho menos frecuentes, aunque no lo creas, son las lesiones Tipo 3A o roturas parciales de uno o más músculos (antes le llamábamos distensiones o desgarros), asociadas a pobre calentamiento y/o entrenamiento intenso, generalmente causan incapacidad funcional inmediata tras oír un chasquido que genera dolor en la pierna al correr, habitualmente en sesiones de potencia o velocidad; por estas lesiones seguro buscarás atención médica, la necesitas.


Muchos corredores tienen dolor de piernas al correr, hay muchas causas, prácticamente todas demandan la atención de un profesional médico en deporte quien además de favorecer la curación de la lesión, habrá de corregir o mejorar los factores relacionados con su potencial re-aparición.

Cada día, el deporte es más ciencia y menos arte… por eso los atletas siguen rompiendo marcas y claro, también por eso, sigue siendo hermoso.


* En general, el sobreuso tiene tres maneras de generarse:

1. Cargas adecuadas y pobre recuperación (sueño, descanso, nutrición/hidratación, hábitos etc.)

2. Cargas demasiado altas aún con recuperación adecuada y, la peor,

3. Cargas demasiado altas con pobre recuperación (¿suena familiar “chavorruco”?).

Este es el siglo XXI, el control adecuado de la carga, la monitorización de la recuperación y la adecuación del entrenamiento a las características y metas del atleta son, para los verdaderos profesionales del entrenamiento, la única manera de dirigir a sus deportistas.


Referencias


Buskard Andrew NL. Cramping in Sports: Beyond Dehydration. Strength and Conditional Journal 2014.

Mueller-Wohlfahrt H-W y cols.. Terminology and classification of muscle injuries in sport: The Munich consensus statement. British Journal of Sports Medicine 2013.

Brinker MR, O’Connor DP, Almekinders LC y cols. Basic Science and Injury of Muscle, Tendon and Ligament. en DeLee & Drez's Orthopaedic Sports Medicine, 3a edición. Elsevier. Estados Unidos 2011.

333 views
Entradas recientes
bottom of page